Aunque alentadoras, las nevadas caídas durante los últimos días no garantizan aún que el próximo fin de semana las estaciones de esquí asturianas puedan estar abiertas para la práctica del deporte. Así lo aseguraron ayer los responsables tanto de Fuentes de Invierno como de Valgrande Pajares, Jorge Fernández y Felipe García Pertierra respectivamente. Ambos intentaron lanzar un mensaje «moderadamente optimista» y aunque aseguraron que «ya se está trabajando para tratar de conservar la nieve que cayó», aún es necesario «que el tiempo nos eche una pequeña mano más».
Sin embargo, a medida que las horas fueron pasando ayer, las sensaciones fueron cada vez más pesimistas de cara a una posible apertura. El responsable de la estación allerana señalaba a primera hora de la mañana de ayer, que «aunque en las últimas horas no ha caído nada de nieve, ya hemos sacado las máquinas pisapistas para tratar de acondicionar la capa que hay». «No es algo descabellado pensar que podríamos abrir de cara al fin de semana y al puente», aseguraba Jorge Fernández. Sin embargo, horas después, el propio director del complejo allerano explicaba que el panorama había cambiado: «Ha comenzado a llover y ahora la situación es mucho más complicada. Va a ser prácticamente imposible que lleguemos al puente».
Mientras, el director de la estación lenense de Valgrande-Pajares aseguró que «en las últimas horas las temperaturas están ascendiendo y eso es un problema», al tiempo que añadió que «las previsión que nos acaba de llegar no indica precipitaciones en forma de nieve hasta el lunes». Sin embargo, García Pertierra indicó que «el trabajo que estamos haciendo ahora está enfocado a intentar abrir el fin de semana, y si tenemos una oportunidad de hacerlo, se abrirá». El responsable del complejo lenense aseguró que «lo ideal sería que cayera otra pequeña nevada o bien que volvieran a bajar las temperaturas para volver a iniciar los sistemas de innivación artificial». Con esas premisas, Valgrande Pajares, cuyos espesores de nieve actuales varían según la zona, estaría en disposición de abrir sus puertas. Sin embargo, si esto no se cumple, los esquiadores deberán esperar un poco más para el inicio de la temporada en Asturias.